El partido jugado en El Plantío el pasado domingo dejó muchos frentes abiertos al margen de la derrota del Racing. El colegiado más tarjetero de la categoría, Herrero Arenas, encargado de dirigir la contienda, mostró ocho tarjetas (siete amarillas y una roja) y tuvo en varias ocasiones alguna salida de tono. Javi Soria sufrió un desafortunado incidente durante un lance del partido en el que, tras sufrir un bofetón su compañero Miguélez, se acercó al árbitro para indicarle si no había visto la acción y recibió una contestación fuera de tono y soez. «Vete a tomar por el c...». El conquense, además de sorprenderse, recibió en ese instante una tarjeta amarilla que en el acta fue recogida por el colegiado con las siguientes palabras. «Realizar observaciones a una decisión mía». Dicha amonestación supone la quinta en la cuenta del centrocampista y, por tanto, se perderá el partido del próximo domingo ante el Noja.
El Racing prefiere pasar página y no dar más importancia a este incidente y olvidarse de lo sucedido en Burgos. Además, después de haber estado en el punto de mira, según sus propios dirigentes, el pasado año por el estamento arbitral no quieren esta campaña alimentar polémicas. No obstante, desde el seno de la plantilla ya se han mostrado molestos por algunas de las actuaciones arbitrales sufridas. De esta manera, los jugadores, que no se han querido manifestar públicamente, sí se encuentran preocupados por la importancia que pueden tener las rigurosas decisiones que se han tomado en algunos partidos en su contra.
Fuente: El Diario Montañés