El regreso a los entrenamientos del Racing tras sus ‘vacaciones’ de Semana Santa trajo una buena noticia. A Mario Fernández se le pudo ver entrenar a una intensidad más elevada que semanas atrás.
El portero se ejercitó en la primera parte del entrenamiento junto a Alejandro García y Sergio Pérez (los otros dos guardametas) y ya ha comenzado a lanzarse al suelo y a desarrollar aspectos más vinculados de manera específica al trabajo propio de un cancerbero. Con precaución, pero este lunes ya se le pudo ver en La Albericia lanzándose al suelo con bastante facilidad y las sensaciones del capitán cada vez son más positivas. A pesar de que los médicos son optimistas, se mantiene la cautela sobre los plazos de su recuperación.
Las ganas y el deseo del arquero es regresar cuanto antes y, después de comprobar cómo va su evolución, no es descartable que antes de que acabe la temporada pueda volver a saltar a un terreno de juego.
En cuanto al resto del equipo, Paco Fernández organizó una sesión en la que alternó el trabajo físico con el táctico. Después de dos días de descanso, el técnico apretó a los futbolistas con ejercicios exigentes de carrera sin balón y concluyó la jornada con partidos en campos reducidos con mucho contacto con el balón. No ensayó con la alineación que pretende utilizar el próximo domingo en Logroño, pero sí se pudo comprobar que Javi Soria y Andreu serán los pivotes, ante la sanción de Granero. Ambos jugadores volvieron a formar juntos, por lo que se repetirá pareja que jugó en Noja.
La otra novedad podría ser la vuelta de Koné, que disfrutó ante el Tropezón de unos minutos y Fernández medita darle entrada para que recupere el ritmo de competición antes de que llegue el ansiado play off.
En la sesión, seguida por un nutrido grupo de aficionados, se pudo ver también al entrenador con ganas de corregir y muy metido en el trabajo de sus jugadores. El equipo quiere certificar, si es posible, el título esta semana en Las Gaunas.
Fuente: El Diario Montañés